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¿Alivio en EE.UU.? Lo que significa el primer recorte de tasas de la Fed para la inflación y el bolsillo

septiembre 18, 2025
¿Alivio en EE.UU.? Lo que significa el primer recorte de tasas de la Fed para la inflación y el bolsillo

¿Alivio en EE.UU.? Lo que significa el primer recorte de tasas de la Fed para la inflación y el bolsillo

En Estados Unidos, se ha dado un giro relevante en la política monetaria: la Reserva Federal (la Fed) ha decidido recortar su tasa de interés referencial por primera vez después de un periodo prolongado con tasas altas. Este movimiento, largamente anticipado por los mercados, tiene implicaciones directas no sólo para la inflación, sino también para el costo de los préstamos, la actividad económica y la vida diaria de millones de ciudadanos.

Para muchos economistas y analistas, este recorte llega como una señal de que la Fed considera que la presión inflacionaria está cediendo lo suficiente como para relajar levemente la política monetaria. Pero el camino no estará exento de riesgos: ¿podrá mantenerse la inflación bajo control? ¿Qué impacto real tendrá este cambio en tasas sobre hipotecas, créditos, ahorro y consumo?

¿Qué decisión tomó la Fed y por qué ahora?

  • El recorte: La Reserva Federal redujo su tasa de interés de referencia, en un movimiento que muchos ven como el primer ajuste importante desde la era de tasas elevadas que se estableció para contener la inflación post-pandemia.
  • Motivos: Algunos factores que motivaron esta decisión incluyen:
    1. Inflación moderándose: Aunque la inflación aún está por encima del objetivo tradicional (~2%), se han observado signos de desaceleración o al menos de cierta estabilización.
    2. Presión sobre los costos de financiamiento: Las tasas de interés altas encarecen préstamos, hipotecas y líneas de crédito, perjudicando tanto a consumidores como empresas. Hay señales de que la economía necesita cierto “respiro” para evitar una desaceleración más fuerte.
    3. Mercado laboral y otros indicadores: Aunque algunos sectores laborales siguen fuertes, otros muestran señales de enfriamiento. La Fed debe equilibrar entre controlar inflación sin causar una recesión pronunciada.
  • Magnitud del recorte: Fue un ajuste de aproximadamente 0,25 puntos porcentuales (25 puntos básicos). 
  • Este recorte sitúa la tasa en un rango más cómodo para estimular algo el endeudamiento y aliviar la carga financiera, pero no demasiado bajo como para reactivar riesgos inflacionarios.

¿Qué se espera lograr con esta medida?

  • Reducción del costo del crédito: Menos tasa de interés significa que los préstamos nuevos —para consumo, vivienda, vehículos— serán algo más accesibles.
  • Alivio para deudas variables y tarjetas: Personas con deudas sujetas a tasa variable podrían ver pagos más bajos si el tipo de interés de referencia influye en sus cuotas.
  • Estimular la actividad económica: Con tasas ligeramente menores, hay incentivos para que las empresas inviertan, que los consumidores gasten, lo que puede evitar que la economía se enfríe demasiado.
  • Mejorar expectativas de inflación: Si los agentes económicos creen que la Fed se mueve con prudencia y que la inflación va bajando, puede calmar las expectativas, lo que a su vez ayuda a contener alzas de precios.

Los riesgos que siguen vigentes

Este recorte no es una solución mágica; hay varios riesgos que podrían limitar sus efectos o incluso contraatacar:

  • Inflación persistente: Aunque hay señales de moderación, la inflación todavía está por encima del objetivo de la Fed, y factores externos como precios de alimentos, energía, tarifas de transporte o interrupciones logísticas pueden reavivarla.
  • Demora en la transmisión de políticas: Los efectos de los recortes en tasas tardan en sentirse, especialmente en mercados como el de vivienda, préstamos de largo plazo o para inversiones empresariales.
  • Posible sobrecalentamiento: Si el recorte estimula demasiado la actividad antes de que la inflación esté firmemente bajo control, podría generar presiones al alza nuevamente.
  • Expectativas desalineadas: Si los ciudadanos, empresas y mercados no perciben que la Fed realmente tenga un plan creíble para seguir bajando inflación, podrían seguir protegiéndose con aumentos de precios preventivos, lo que complica la tarea del banco central.
  • Condiciones externas adversas: Subidas inesperadas en los precios internacionales, nuevos choques en energía o interrupciones en las cadenas de suministro podrían frenar o revertir cualquier avance.

El impacto palpable para el ciudadano común

¿Cómo se traduce esto al día a día de los hogares y personas en EE.UU.?

  • Hipotecas y préstamos personales: Para quienes pidan prestado ahora, podrían comenzar a encontrar tasas algo menores, lo que alivia los pagos mensuales. También refinanciar deudas viejas podría ser más atractivo.
  • Ahorro: Las cuentas de ahorro o instrumentos financieros que rinden en función de la tasa de interés referencial pueden ver sus retornos reducidos, lo que lo compensa parcialmente con menores costos de endeudamiento.
  • Costo de bienes importados: Menos directamente afectado por la tasa de interés, pero si esta medida ayuda a estabilizar el dólar y contener inflación, podría moderar aumentos en productos importados.
  • Salarios y empleo: Si la economía se reactiva un poco, hay espacio para mejorar empleo, pero los salarios reales ya están afectados por inflación; cualquier recuperación deberá tomar en cuenta el poder adquisitivo perdido.

Comparación histórica

  • Este recorte es el primero desde 2020 para muchos instrumentos clave, es decir, se rompe con una racha de estabilidad de tasas altas luego de los ciclos de subidas para contener inflación.
  • En años recientes, las decisiones de la Fed han sido predominantemente al alza, ante la urgencia de poner freno a una inflación descontrolada tras la pandemia. El recorte actual indica que la Fed está considerando que ese ciclo puede estar cerca de su fin, o al menos de una fase de moderación.

Escenarios posibles hacia adelante

Según lo que haga la Fed y cómo reaccionen la inflación, los mercados y la economía, estos podrían ser algunos desenlaces:

Escenario A: Desinflación controlada

  • La inflación continúa moderándose gradualmente.
  • La Fed sigue reduciendo tasas poco a poco, asegurándose de no precipitarse.
  • Aumenta la confianza en consumidores y empresas.
  • Crecimiento económico modesto pero sostenido.

Escenario B: Estancamiento o sobresalto

  • Si la inflación no baja lo suficiente o vuelve a subir por factores externos, la Fed podría detener recortes, o incluso volver a subir tasas si es necesario.
  • Riesgo de que el crecimiento se frene, o de que sectores sensibles como construcción, vivienda o consumo decaigan.

Escenario C: Choque externo imprevisto

  • Un aumento fuerte en precios energéticos, alimentos, o una crisis global que afecte cadenas de suministro podría empeorar la inflación.
  • En ese escenario, los beneficios del recorte pueden verse erosionados rápidamente, y la Fed podría verse obligada a ajustar su política abruptamente.

Relevancia para países que siguen los movimientos de la Fed

Las decisiones de la Fed no solo importan en EE.UU.; tienen ecos en todo el mundo:

  • Mercados emergentes: suelen reaccionar ante cambios en la tasa de EE.UU., ya que afectan los flujos de capital, el valor del dólar, y por ende el tipo de cambio local. Tasas de interés en EE.UU. más bajas pueden aliviar la presión sobre monedas emergentes, pero también generan expectativas y riesgos.
  • Inflación importada: países que dependen de importaciones de bienes, energía o tecnología sienten los efectos de movimientos en la moneda estadounidense, pues pueden encarecer productos.
  • Política monetaria comparativa: bancos centrales de otros países observan la Fed para calibrar su propia política: cuándo subir tasas, cuándo bajarlas, y cómo manejar expectativas.

El recorte de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal marca un punto de inflexión en la estrategia para hacer frente a la inflación. Es una señal de que las autoridades monetarias creen que la presión de precios ya no requiere medidas tan estrictas como las aplicadas en los últimos tiempos, o al menos una reducción gradual del costo del dinero.

Pero este paso no es libre de riesgos: la inflación no está vencida, la economía global sigue enfrentando incertidumbres, y los ciudadanos llevan el peso de años de precios altos. Lo que se necesita ahora es que la Fed acompañe este recorte con previsibilidad, transparencia, decisiones basadas en datos sólidos, y señales claras para los mercados.